* El valor de pensar de forma diferente
* Contacto con un proveedor de café ecológico de comercio justo
* Aprobación de la dirección, si procede
* Buena comunicación en la plantilla
Casi todas las empresas tienen una cocina de café. A menudo, el café es incluso gratuito. ¡Eso es genial! Pero si no es café ecológico de comercio justo, la gente del campo y la naturaleza pagan el precio. Por eso puse en marcha una iniciativa en mi empresa para cambiar al café ecológico, y funcionó. Había que superar dos grandes obstáculos:
1. había prejuicios
El café no tendría buen sabor o que el café de Comercio Justo no era adecuado para las máquinas de café industriales.
El café ecológico de comercio justo ya está disponible para todo tipo de máquinas y además es delicioso. La cuestión del sabor puede resolverse rápidamente con una cata de café. Es importante que lleves a tus colegas contigo y que no decidas por encima de ellos.
2. el precio
Por supuesto, el café ecológico y justo es más caro. Si el empresario lo paga, hay que acordarlo. Los empleados pueden incluso estar dispuestos a pagar una pequeña prima por el café, pero en realidad debería ser del interés del empresario no servir productos que dañen a las personas y/o a la naturaleza.
Es un pequeño acto simbólico con el que los empresarios pueden enviar una señal positiva a los trabajadores. Pero a veces las empresas necesitan a una sola persona para dar el pistoletazo de salida. ¿Eres tú?
Y no olvides escribirnos sobre tus experiencias en kontakt@wir-tschaft.jetzt. Estaremos encantados de recibir adiciones a la receta o nuevas recetas.
¡Diviértete cocinando!
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Esta receta es de
Frank Braun